I.
Palabras de introducción
1:1
Hab 1
:1
1:1
La carga que vio el profeta
1Habacuc.
II.
El primer diálogo entre el profeta y Jehová
1:2-11
A.
El profeta indaga ante Jehová
vs. 2-4
Hab 1
:2
1:2
¿Hasta cuándo, oh Jehová, clamaré,
y Tú
ano oirás?
Clamo a Ti: ¡Violencia!
Y Tú no salvas.
Hab 1
:3
1:3
¿Por qué me haces ver la iniquidad,
y haces que vea el mal?
Sí, destrucción y violencia están delante de mí;
y hay pleitos, y surgen contiendas.
Hab 1
:4
1:4
Por eso la ley no es eficaz,
y el derecho nunca sale
a luz;
porque el malvado rodea al justo;
por eso, sale pervertido el derecho.
B.
Jehová responde al profeta
vs. 5-11
Hab 1
:5
1:5
Mirad entre las naciones, ved
y quedaos
aasombrados, completamente asombrados.
Porque Yo haré una obra en vuestros días,
que aun si os dijera, no lo creeríais.
Hab 1
:6
1:6
Porque voy a levantar a los
acaldeos,
nación amarga y presurosa,
que marcha por la anchura de la tierra
para poseer habitaciones que no
1les pertenecen.
Hab 1
:7
1:7
Terribles y espantosos son;
de ellos mismos proceden su juicio y su autoridad.
Hab 1
:8
1:8
Y sus caballos son más veloces que leopardos
y más ligeros que lobos nocturnos.
Sus jinetes brincan;
sí, vienen de
alejos sus jinetes;
vuelan como
báguila que se apresura a devorar.
Hab 1
:9
1:9
Todos ellos vienen para hacer violencia;
tienen los rostros fijos hacia adelante,
y recogen cautivos como arena.
Hab 1
:10
1:10
Se mofan de los reyes,
y los potentados les sirven de irrisión;
se ríen de toda fortaleza,
porque amontonan tierra y la toman.
Hab 1
:11
1:11
Luego pasarán en medio
como el viento y pasarán por encima,
y así se les tendrá por culpables; esto —su fuerza— es su dios.
III.
El segundo diálogo entre el profeta y Jehová
1:12—2:20
A.
El profeta indaga ante Jehová
1:12—2:1
Hab 1
:12
1:12
¿No eres Tú desde la
aeternidad, oh Jehová,
Dios mío, Santo mío? No moriremos.
Oh Jehová, para
bjuicio 1los has puesto;
y Tú, oh Roca,
1los has establecido para corrección.
Hab 1
:13
1:13
Eres de ojos muy puros para contemplar la maldad,
ni puedes mirar el mal.
¿Por qué
amiras a los que obran pérfidamente
y guardas silencio cuando el malvado traga al que es
1más justo que él?
Hab 1
:14
1:14
Y haces que sea el hombre como los peces del mar,
como lo que se arrastra, que no tienen quien los gobierne.
Hab 1
:15
1:15
A todos los saca con
aanzuelo,
los recoge con su red
y los junta en sus mallas;
por lo cual se regocija y exulta.
Hab 1
:16
1:16
Por eso ofrece
asacrificios a su red,
y quema incienso a sus mallas,
porque gracias a ellas su porción es pingüe,
y su comida es abundante.
Hab 1
:17
1:17
¿Vaciará por eso su red
y matará de continuo a las naciones sin perdonar?