I.
La historia concerniente a Samuel
1 S. 1:1—8:22
A.
Sus origenes y nacimiento
1:1-20
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1Hubo un varón de Ramataim-zofim, de la región montañosa de Efraín, que se llamaba
aElcana, hijo de Jeroham, hijo de Eliú, hijo de Tohu, hijo de Zuf, efrateo.
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Y tenía dos mujeres; el nombre de una era Ana, y el de la otra, Penina. Y Penina tenía hijos, mas Ana
ano los tenía.
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Y aaño tras año aquel varón subía de su ciudad para adorar y ofrecer sacrificios a Jehová de los ejércitos en
bSilo. Y los dos hijos de Elí, Ofni y Finees, sacerdotes de Jehová, estaban allí.
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Y cuando llegaba el día en que Elcana ofrecía sacrificios, daba porciones a Penina, su mujer, y a todos los hijos e hijas de ella.
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Pero a Ana le daba una doble porción, pues él amaba a Ana; no obstante
1Jehová había cerrado su matriz.
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Y su rival la provocaba amargamente para irritarla porque Jehová había cerrado su matriz.
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Así sucedía año tras año; cuando subía a la casa de Jehová,
1la otra la provocaba de este modo, y ella lloraba y no comía.
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Y Elcana, su marido, le dijo: Ana, ¿por qué lloras, y por qué no comes? ¿Y por qué está triste tu corazón? ¿No te soy yo mejor que diez hijos?
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Y se levantó Ana, después de haber ellos comido y bebido en Silo. El sacerdote Elí, entretanto, estaba sentado en su silla junto al poste de la puerta del
1atemplo de Jehová.
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1:10
Ella, con amargura de alma,
1oró a Jehová y lloró mucho.
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1:11
E hizo
avoto, diciendo: Oh Jehová de los ejércitos, si
bmiras la aflicción de Tu sierva, te acuerdas de mí y no te olvidas de Tu sierva, sino que das a Tu sierva un hijo varón, yo lo daré a Jehová por todos los días de su vida, y
cno pasará
1navaja sobre su cabeza.
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Mientras ella continuaba orando por mucho tiempo delante de Jehová, Elí observaba la boca de ella.
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Y Ana hablaba en su corazón; solamente se movían sus labios, mas no se oía su voz, por lo que Elí pensó que ella estaba ebria.
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Entonces le dijo Elí: ¿Hasta cuándo estarás ebria? Echa de ti tu vino.
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Y Ana respondió y dijo: No, señor mío; yo soy una mujer atribulada en espíritu. No he bebido vino ni bebida embriagante, sino que he derramado mi alma delante de Jehová.
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No tomes a tu sierva por una mujer indigna; pues hasta ahora he hablado a causa de mi gran ansiedad y la provocación
que he sufrido.
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Luego Elí respondió y dijo: Ve en paz, y el Dios de Israel te conceda la petición que le hiciste.
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Ella respondió: Halle tu sierva favor delante de tus ojos. Y se fue la mujer por su camino; y comió, y ya no estuvo
triste su semblante.
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Levantándose de madrugada, adoraron delante de Jehová, volvieron y llegaron a su casa en Ramá. Y Elcana conoció a su mujer Ana, y Jehová se
aacordó de ella.
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Aconteció que al cumplirse el tiempo, Ana concibió y dio a luz un hijo; y le puso por nombre
1Samuel: Porque,
dijo, se lo pedí a Jehová.
B.
Su juventud
1:21—2:11
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1:21
Después subió Elcana, el varón, con toda su casa para ofrecer a Jehová el sacrificio anual y su voto.
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Pero Ana no subió, porque dijo a su marido: Cuando sea destetado el niño, lo
allevaré para que sea presentado delante de Jehová y se quede allí para siempre.
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Y Elcana, su marido, le respondió: Haz lo que bien te parezca; quédate hasta que lo destetes. Solamente que confirme Jehová Su palabra. Y se quedó la mujer y amamantó a su hijo hasta que lo destetó.
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Después que lo hubo destetado, lo hizo subir junto con ella, junto con tres toros, un efa de harina y un odre de vino; y lo trajo a la casa de Jehová en
aSilo, aunque el niño era pequeño.
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Y degollaron el toro y llevaron el niño a Elí.
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1:26
Y ella dijo: ¡Oh, señor mío! Vive tu alma, señor mío, yo soy aquella mujer que estuvo aquí junto a ti, orando a Jehová.
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Por este niño oraba, y Jehová me concedió lo que le
apedí.
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1:28
Yo, pues,
1lo he dado en préstamo a Jehová; todos los días que viva, será prestado a Jehová. Y él adoró allí a Jehová.
