Mensajes para creyentes nuevos: Disciplina del Espíritu Santo, La #20
Muchos creyentes descubren que su persona necesita ser demolida. No obstante, son demasiado inteligentes y tratan de usar medios artificiales para derribar la naturaleza vieja, su carácter y sus antiguos hábitos. Pero lo primero que Dios derribará serán nuestros medios artificiales. Hermanos y hermanas, es inútil y contraproducente valerse de la energía humana para tratar de derribar todo aquello que somos por naturaleza. Debemos comprender desde el principio que todo lo viejo se debe demoler. Sin embargo, no lo podemos hacer por nosotros mismos. Los esfuerzos del hombre por derribarse a sí mismo solamente producirán un adorno exterior y se convertirán en un estorbo para el crecimiento de la vida espiritual. No necesitamos demolernos a nosotros mismos; Dios se encargará de hacerlo.