
Watchman Nee no asistió a ninguna escuela teológica ni a ningún instituto bíblico. Casi todo lo que él aprendió acerca de Cristo, del Espíritu y de la historia de la iglesia, lo adquirió mediante el estudio de la Biblia y la lectura de los libros de hombres espirituales.
Watchman Nee estudió la Biblia diligentemente desde el comienzo de su vida cristiana. Los métodos que usó para estudiarla fueron los siguientes:
1) Hacer un estudio general de todos los libros de la Biblia en forma consecutiva a fin de obtener una visión global.
2) Estudiar un libro específico, como por ejemplo Génesis, Daniel, Mateo, Romanos o Apocalipsis para examinar las profundidades contenidas en ese libro.
3) Estudiar temas, tales como: el nuevo pacto, las eras o dispensaciones, la segunda venida de Cristo, el reino y el arrebatamiento, a fin de obtener una idea completa de esas verdades.
4) Estudiar palabras específicas e importantes, tales como redención, perdón, justificación, reconciliación, salvación, justicia y santidad, a fin de conocer su significado básico.
5) Estudiar la tipología presentada en el tabernáculo, el altar, el arca, el templo y las ofrendas, para obtener un cuadro claro de Cristo, de la iglesia y de las cosas espirituales.
6) Estudiar las alegorías, tales como la de Sara y Agar (Gá. 4:24), el pozo de Jacob (Jn. 4:12-14), y los ríos de agua viva (Jn. 7:38), para comprender el significado de estos temas espirituales.
7) Estudiar las parábolas, como por ejemplo, las siete parábolas de Mateo 13, la de las diez vírgenes y la de los talentos, para comprender la profundidad de estos misterios.
8) Estudiar los números que aparecen con frecuencia en la Biblia, tales como el tres, el cinco, el siete, el ocho y el doce, para entender su significado.
9) Estudiar las profecías, tales como la profecía acerca de Israel, la profecía acerca de la iglesia y de los gentiles, para comprender la verdad de la Biblia acerca de las diferentes eras.
10) Seguir la vida de algunos personajes bíblicos, tales como Abraham, David, Daniel, Pedro y Pablo, para aprender del ejemplo de sus vidas en las Escrituras.
11) Estudiar la historia, como por ejemplo, la historia de Israel y la historia de la iglesia, para ver la forma en que Dios administra Su gobierno.
12) Estudiar la poesía y los cantos que componen el libro de Salmos, y los cánticos que aparecen en otros libros de la Biblia, para aprender a alabar a Dios y a orar.
13) Estudiar comparando pasajes paralelos o contrastantes de la Biblia.
14) Examinar los textos originales, hebreo y griego, para obtener el significado exacto de alguna palabra o frase.
15) Apoyarse en los escritos de otros autores para recibir ayuda e inspiración y para tener una posición equilibrada.
16) Recoger el conocimiento y recibir la luz de la Biblia. El usaba una copia especial de la Biblia para hacer anotaciones y apuntes que le recordaran ideas específicas. El ayudó a otros a estudiar toda la Biblia en un año, lo cual se puede hacer leyendo cada día tres capítulos del Antiguo Testamento y uno del Nuevo.
17) Estudiar a fin de obtener vida al recibir el pan diario que se necesita para la vida espiritual. Con este fin él usaba otra Biblia, en la cual no escribía notas ni la marcaba, para recibir nueva luz y nutrición espiritual. También ayudaba a otros a que hicieran lo mismo cada mañana leyendo unos pocos versículos y digiriéndolos en la presencia del Señor, con un espíritu de oración.
18) Hacer una lectura rápida para familiarizarse con la Biblia. Como a los veinte años de edad, pasó un año en el que leía el Nuevo Testamento en su totalidad una vez por semana.
19) Leer lentamente para examinar ciertas porciones de la Palabra y meditar en ellas.
20) Memorizar ciertos versículos o porciones cruciales a fin de guardar la Palabra de Dios en el corazón con la cual pudiera suplir las necesidades constantes y las inmediatas.
Al estudiar la Biblia de tantas formas, Watchman Nee llegó a familiarizarse muy bien con ella y recibió iluminación acerca del propósito de Dios, de Cristo, de la iglesia y de lo relacionado con la salvación y la vida.
Watchman Nee no sólo era un excelente estudiante de la Biblia, sino que también era un lector estudioso de libros espirituales. Era muy perspicaz y dotado, pues podía comprender, seleccionar, discernir y aprender de memoria el material que leía. El podía fácilmente detectar los temas principales de un libro con una sola hojeada. Por medio de las publicaciones cristianas no sólo recibió luz espiritual y vida, sino que también llegó a ser versado en la historia de la iglesia y del cristianismo del mundo occidental. Por medio de Margarita Barber conoció los libros de D. M. Panton, Robert Govett, G. H. Pember, Jessie Penn-Lewis, T. Austin-Sparks y otros. El también coleccionaba los escritos de los maestros de las Asambleas de los Hermanos, tales como John Nelson Darby, William Kelly, C. H. Mackintosh, y de muchos otros autores cristianos. En los primeros días de su ministerio invertía un tercio de sus ingresos en sus necesidades, otro en ayudar a otros y con el tercio restante compraba libros. Hizo un convenio con algunas tiendas de libros usados en Londres, para que cuando obtuvieran un libro de los que él había solicitado, le fuera enviado automáticamente. De este modo, coleccionó casi todos los escritos cristianos clásicos aun los del siglo primero. Coleccionó más de tres mil excelentes libros; algunos de la historia de la iglesia, biografías y autobiografías de cristianos destacados, y los principales mensajes y comentarios de escritores espirituales reconocidos. A los veintitrés años de edad, su cuarto estaba repleto de libros. Había libros en el piso, y dos filas de libros a ambos lados de su cama, lo cual dejaba sólo una franja estrecha en el medio donde acostarse. Con frecuencia se decía que estaba sepultado en libros. Por la lectura de esos libros y por su diligente estudio de la Biblia, no sólo adquirió mucho conocimiento acerca de las Escrituras, sino que también adquirió una posición equilibrada en sus puntos de vista. Al estudiar de semejante modo, pudo entender con más profundidad las verdades que recibió de todos sus predecesores. Esto fortaleció y enriqueció grandemente su ministerio para el recobro del Señor. Tomó todo lo positivo de los padres de la iglesia y de todos los hombres prominentes que habían escrito hasta sus días, e integró todo ello en su práctica de la vida cristiana y la vida de iglesia.
Watchman Nee también estudió los himnarios de diferentes grupos cristianos, además de los cantos y los poemas de muchos autores. Llegó a conocer bien unos diez mil himnos, cantos y poemas, de los cuales también recibió luz y ayuda espiritual.
La ayuda que recibió con la lectura puede clasificarse de la siguiente manera:
1) Los escritos de George Cutting, un escritor de las Asambleas de los Hermanos, le enseñaron acerca de la certeza que tiene el creyente de ser salvo.
2) El progreso del peregrino de John Bunyan, las biografías de la señora Guyón y de Hudson Taylor, y los escritos de otros místicos, le ayudaron a comprender lo que es la vida interior individual del creyente.
3) Por los escritos de J. G. Bellett, Charles G. Trumbull, A. B. Simpson, T. Austin-Sparks y otros recibió mucha ayuda en cuanto a la persona de Cristo.
4) El libro El Espíritu de Cristo, de Andrew Murray fue una gran ayuda en lo tocante al Espíritu.
5) Los escritos de Jessie Penn-Lewis y los de la esposa de Charles McDonough le ayudaron a comprender las tres partes del hombre.
6) En la autobiografía de George Müller halló iluminación acerca de la fe.
7) En los libros de Andrew Murray y la biografía de Hudson Taylor halló la luz acerca de permanecer en Cristo.
8) En los libros de Jessie Penn-Lewis pudo ver la aplicación de la muerte de Cristo y la guerra espiritual.
9) Los escritos de T. Austin-Sparks, entre otros, le fueron de ayuda especial en cuanto a las verdades de la resurrección de Cristo y el Cuerpo de Cristo.
10) En el libro El plan redentor de Dios, de Mary McDonough, recibió mucha ayuda en cuanto a ese tema.
11) En los escritos de John Nelson Darby y de otros maestros de los Hermanos vio la luz acerca de lo que es la iglesia.
12) Los escritos de Robert Govett, D. M. Panton, G. H. Pember, y otros escritores de las Asambleas de los Hermanos fueron de ayuda en cuanto a la profecía.
13) La percepción de John Foxe, de E. H. Broadbent y de otros fue de especial ayuda para comprender la historia de la iglesia.
14) Watchman Nee recibió ayuda especial en cuanto a la comprensión de la Biblia y a muchas otras verdades en los escritos de Darby y de los Hermanos.