Mostrar cabecera
Ocultar сabecera
+
!
NT
-
Rápida transición a las notas a los libros del Nuevo Testamento
AT
-
Rápida transición a las notas a los libros del Antiguo Testamento
Cap.
-
Capítulos de libros «Éxodo»
Чтения
Marcadores
Mis lecturas
  • Bezaleel era un maestro constructor, un líder en cuanto al edificio de Dios. Su nombre significa a la sombra de Dios, lo cual indica que Bezaleel, como maestro constructor, era una persona bajo la sombra de la gracia de Dios (cfr. 1 Co. 3:10a; 2 Co. 12:9). Uri, el nombre de su padre, significa luz de Jehová, y Hur, el nombre de su abuelo, significa libre, noble, blanco (en el sentido de limpio y puro). Estos tres nombres indican qué clase de persona deberá ser la que edifique la morada de Dios.

  • La edificación de la morada de Dios, la iglesia, es una obra noble que debe realizar todo el pueblo de Dios (1 Co. 3:10; Ef. 4:12, 16). Sin embargo, la sabiduría, el entendimiento, el conocimiento y la destreza para esta obra deberá ser Dios mismo, quien es el Espíritu para nosotros (cfr. Col. 1:28-29). Únicamente el Espíritu de Dios puede edificar Su propia morada por medio de nosotros.

  • Para edificar la iglesia, todos los creyentes tienen que saber cómo hacer uso de la naturaleza divina —el oro— de la redención de Cristo —la plata— y del justo juicio de Dios —el bronce— (cfr. 1 Co. 3:12), valiéndose de ello como los “materiales” de su obra.

  • Labrar las piedras para engastarlas equivale a ayudar a los santos a ser transformados en piedras y a ser calibrados para que encajen en el edificio de Dios; tallar la madera equivale a laborar en la humanidad de los santos por causa del edificio de Dios; y trabajar en toda clase de artesanía equivale a producir las virtudes más finas del carácter humano con la humanidad elevada de Cristo, virtudes necesarias para la edificación de la iglesia como morada de Dios (cfr. Ef. 4:2 y la nota).

  • Aholiab compartía con Bezaleel la condición de maestro constructor. Su nombre significa la tienda o el tabernáculo de mi padre. Ahisamac, el nombre del padre de Aholiab, significa un hermano de fuerza, o, de sustento. Estos dos nombres significan que Aholiab era un hombre dedicado al tabernáculo de Dios con toda fuerza y sustento.

  • Bezaleel pertenecía a la tribu de Judá (v. 2), la tribu de los reyes (Gn. 49:10), la tribu del Señor Jesús (He. 7:14), y Aholiab pertenecía a la tribu de Dan (v. 6), una tribu de baja condición (Gn. 49:17). El mismo principio es visto en la edificación del templo efectuada bajo la dirección de Salomón, quien era de la tribu de Judá, y de Huram-abi, cuya madre era danita (2 Cr. 2:11-14). Esto indica que la obra de edificación de la morada de Dios debe ser realizada por la totalidad del pueblo de Dios, incluyendo a los de condición elevada y a los de baja condición (Ef. 4:11-16).

  • Aquí se menciona nuevamente el Sábado (cfr. Éx. 20:8-11), en relación con la obra de edificación de la morada de Dios, lo cual significa que el pueblo de Dios —al laborar con Dios y para Él— tiene que aprender a reposar con Él al disfrutarle y ser lleno de Él. Guardar el Sábado es señal (v. 17) de que el pueblo de Dios labora para Dios no por sus propias fuerzas, sino al disfrutar de Dios y ser uno con Él. Esto es también un pacto eterno (v. 16) que le garantiza a Dios que seremos uno con Él al disfrutarle primero para, después, laborar con Él, para Él y en unidad con Él. Dios primero trabajó y después reposó; el hombre primero reposa y después trabaja (Gn. 2:2 y la nota). Esta mención del Sábado indica también que todo lo relacionado con el tabernáculo y su mobiliario nos conduce al Sábado de Dios, con el reposo y refrigerio que se experimenta al disfrutar lo que Dios se propuso y realizó.

  • Véase la nota Éx. 20:101a.

  • Cuando laboramos para Dios sin disfrutar de Él y ser uno con Él, el resultado es muerte espiritual y la pérdida de la comunión en el Cuerpo.

  • La ley y sus ordenanzas fueron promulgadas por Dios en 20:1—23:19. Después, en Éx. 24:12, Dios llamó a Moisés a la cumbre del monte para darle las tablas de la ley, el Testimonio (véase la nota Éx. 20:11). Sin embargo, antes de darle a Moisés las tablas de la ley, Dios primero le mostró el diseño del tabernáculo y las instrucciones con respecto al sacerdocio (25:1—31:17). Esto indica que si bien Dios le dio la ley al hombre, Él sabía que éste no podría cumplirla; por tanto, Él preparó el tabernáculo, las ofrendas y el sacerdocio en todos sus aspectos —la realidad y cumplimiento de todo lo cual es Cristo— como el camino de gracia para que Su pueblo caído y pecador pudiera tener contacto con Él y disfrutarle (cfr. He. 9:1-28; 10:1-22). Aunque Dios dio la ley, Él no puso Su confianza en la ley. Él ha puesto Su confianza —y todavía la pone— absolutamente en Cristo, el camino de gracia para Su pueblo. Véase la nota Éx. 25:11.

Biblia aplicación de android
Reproducir audio
Búsqueda del alfabeto
Rellena el formulario
Rápida transición
a los libros y capítulos de la Biblia
Haga clic en los enlaces o haga clic en ellos
Los enlaces se pueden ocultar en Configuración