Mostrar cabecera
Ocultar сabecera
+
!
NT
-
Navega rápidamente por los libros de vida del Nuevo Testamento
AT
-
Navega rápidamente por los libros de vida del Antiguo Testamento
С
-
Mensajes del libro «Cumplimiento del tabernáculo y de las ofrendas en los escritos de Juan, El»
Чтения
Marcadores
Mis lecturas

CAPÍTULO TRECE

LAS PERSONAS SERPENTINAS LLEGAN A SER EL AUMENTO UNIVERSAL DEL CRISTO ILIMITADO POR EL ESPÍRITU INMENSURABLE CON LA VIDA ETERNA

(3)

  Lectura bíblica: Jn. 3:5-6, 8, 14-16, 29-30, 31-36

  En el capítulo anterior vimos que el Cristo ilimitado viene de arriba, que es sobre todos, que es amado por el Padre, que el Padre le ha entregado todas las cosas, que fue enviado por Dios y que Él habla la palabra de Dios. Ahora pasemos a considerar otras características de este Cristo ilimitado.

No da el Espíritu por medida

  Juan 3:34 dice del Cristo ilimitado: “No da el Espíritu por medida”. ¿De qué manera el Cristo ilimitado nos da el Espíritu? Él nos da el Espíritu al hablarnos la palabra de Dios. Sin embargo, algunos cristianos piensan que la manera de recibir el Espíritu es ayunar y orar por cierto periodo de tiempo. Pero esta práctica puede terminar más bien en un vacío. Puedo testificar que esta manera de ayunar y orar para recibir el Espíritu, a mí no me sirvió de nada. ¿Cuál es la manera apropiada para recibir el Espíritu sin medida? La manera es recibir el réma de Dios. Podemos testificar que si tocamos debidamente la palabra de Dios, y la digerimos en nuestro espíritu, seremos llenos del Espíritu de Dios. Esto es real en nuestra experiencia.

  La única manera en que llegamos a ser el aumento universal del Cristo ilimitado es recibir el Espíritu y ser llenos del Espíritu. Cuanto más Espíritu recibamos, más seremos el aumento de Cristo. Este aumento comienza con nuestra regeneración, y tendrá su consumación al ser llenos del Espíritu inmensurable.

  No sólo debemos aprender a leer y estudiar la Palabra, sino también a comerla. Tenemos que aprender a recibir la Palabra de Dios en nuestro espíritu y digerirla allí. Es así como disfrutamos la Palabra de Dios en nuestro espíritu. Muchos de nosotros podemos testificar que cuando disfrutamos al Señor de esta manera, somos llenos del Espíritu inmensurable.

  En el pasado, un buen número de nosotros fuimos influenciados, distraídos o despistados por el concepto de que necesitamos ayunar y orar por un periodo de tiempo para que repentinamente recibamos el Espíritu. Pero, el llenar del Espíritu genuino ocurre al tomar la Palabra de Dios de manera apropiada mediante el ejercicio de nuestro espíritu. No experimentamos ser llenos del Espíritu simplemente estudiando la Palabra a fin de estimular nuestra mentalidad. Ésa no es la manera apropiada de manejar la Palabra de Dios. Al leer la Palabra necesitamos ejercitar nuestro espíritu. Necesitamos ejercitar nuestro espíritu para recibir la Palabra escrita de Dios, a fin de que ésta llegue a ser la palabra hablada que se nos da para el momento. Entonces, interiormente tendremos la palabra, la cual será espíritu y vida para nosotros. De esta manera el Espíritu todo-inclusivo nos será dado por el Cristo ilimitado.

  Muchos de nosotros podemos testificar que somos llenos con el Espíritu inmensurable al comer la Palabra, y nos damos cuenta de que el Dador de este Espíritu es el Cristo ilimitado. Cristo mismo es ilimitado, y el Espíritu que Él nos da es inmensurable. Por consiguiente, nuestro disfrute de Cristo y del Espíritu llega a ser eterno. Disfrutamos la vida eterna, y esta vida produce el aumento universal del Cristo ilimitado. Confío en que todos nosotros veamos esto con claridad.

Da la vida eterna a Sus creyentes

  Mediante la Palabra recibimos el Espíritu, y cuando obtenemos el Espíritu, obtenemos la vida eterna. Este entendimiento corresponde a lo revelado en Juan 6:63, donde el Señor dice que las palabras que Él habla son espíritu y vida. Esto indica que cuando nosotros tenemos la palabra hablada y viva, la palabra réma, también tenemos el Espíritu y la vida. Así pues, en este capítulo tenemos la palabra hablada de Dios, el Espíritu que se da sin medida y la impartición de la vida eterna a todo el que cree en Cristo. Los versículos 15, 16 y 36 claramente dicen que los que creen en Cristo el Hijo tienen vida eterna. El Cristo ilimitado es Aquel que da la vida eterna a Sus creyentes.

Tiene a la novia como Su aumento universal

  El Cristo ilimitado tiene a la novia como Su aumento universal. Este aumento universal, la novia de Cristo, es la suma total de todos los que fueron regenerados, es una composición viviente de todos los seres humanos regenerados. Ésta es la novia, como el aumento universal del Cristo ilimitado.

  ¿Cómo podemos llegar a ser parte de la novia como el aumento universal de Cristo? Esto solo es posible si recibimos el réma de Dios a fin de ser llenos del Espíritu vivificante. Si recibimos la palabra y somos llenos del Espíritu, disfrutaremos la vida eterna. El resultado será que llegaremos a ser la novia, el aumento universal del Cristo ilimitado.

EL ESPÍRITU INMENSURABLE

El Espíritu compuesto todo-inclusivo, tipificado por el ungüento compuesto

  Ahora consideremos el Espíritu inmensurable. La palabra inmensurable no sólo denota el ámbito del Espíritu, sino que también denota el contenido y la naturaleza del Espíritu. El Espíritu inmensurable es inmensurable en ámbito. También es inmensurable en contenido y naturaleza, esto es, en lo que el Espíritu mismo es. El Espíritu inmensurable es en realidad el Espíritu compuesto todo-inclusivo, tipificado por el ungüento compuesto descrito en Éxodo 30:23-25. (Para abarcar esto en detalle, véase el Estudio-vida de Éxodo, mensajes del 157 al 166). El Espíritu inmensurable, que es el Espíritu compuesto todo-inclusivo, no es simplemente el Espíritu de poder ni el Espíritu de vida. Este Espíritu inmensurable es en realidad la expresión consumada del Dios Triuno.

  El Espíritu inmensurable sobrepasa nuestro entendimiento. Excede nuestra capacidad para hablar de este Espíritu todo-inclusivo. Sencillamente no tenemos las palabras adecuadas para describir a este Espíritu inmensurable. Sabemos que la cultura da origen a las palabras y las expresiones en el lenguaje. Todavía no tenemos la cultura espiritual necesaria para tener el lenguaje adecuado a fin de describir plenamente al inmensurable Espíritu todo-inclusivo.

El Espíritu vivificante

  El Espíritu inmensurable es el Espíritu vivificante (1 Co. 15:45). En resurrección Cristo llegó a ser el Espíritu vivificante a fin de impartir vida. Como el Espíritu vivificante, Él está listo para ser recibido por los que creen en Él. Cuando creemos en Él, Cristo entra en nuestro espíritu y somos unidos a Él, quien es el Espíritu vivificante. De esta manera llegamos a ser un solo espíritu con Él (6:17).

  Hoy en día algunos se oponen a la verdad de que Cristo en resurrección es el Espíritu vivificante. Ellos dicen que así como Adán llegó a ser un alma viviente por medio de la creación, así Cristo llegó a ser un Espíritu viviente por medio de la resurrección. Sin embargo, niegan que el Espíritu vivificante mencionado en 1 Corintios 15:45 sea el Espíritu Santo que da vida. No obstante, admiten que el Espíritu Santo da vida. Ésta es una mejora sobre el concepto de que el Espíritu Santo sólo es un instrumento de poder y no una persona. Pero Pablo dice que el postrer Adán, Cristo en la carne, no sólo fue hecho un espíritu, sino un Espíritu vivificante. Esto no denota simplemente al espíritu de Cristo como un ser. Por supuesto que Cristo tiene un ser espiritual. El Evangelio de Marcos nos dice que cuando Cristo estuvo en la tierra, Él conocía las cosas en Su espíritu (2:8). Además, mientras Él moría en la cruz, Él encomendó Su espíritu a Dios el Padre (Lc. 23:46). También sabemos por el libro de 1 Pedro que después que Cristo fue crucificado y antes de ser resucitado, Él descendió en Espíritu al Tártaro para proclamar la victoria de Dios (3:18-19). Antes de ser resucitado y mientras Su cuerpo aún estaba en la tumba, Cristo fue al Tártaro en Su Espíritu viviente, Su divinidad, para hacer tal declaración. En 1 Corintios 15:45 Pablo dice que Cristo, quien es el postrer Adán, fue hecho el Espíritu vivificante. Cristo llegó a ser el Espíritu vivificante en Su resurrección. El Espíritu de Cristo, quien fue al Tártaro después de la muerte de Cristo y antes de Su resurrección, no podía dar vida. Pero el Espíritu vivificante, que Cristo llegó a ser en resurrección, es idéntico al Espíritu Santo que da vida (2 Co. 3:6).

  ¿Cree usted que hay dos Espíritus divinos que den vida? Creer en dos Espíritus vivificantes es contrario a la verdad. En 1977 publiqué un folleto titulado ¡Qué herejía: dos Padres divinos, dos Espíritus vivificantes y tres Dioses! En este folleto señalamos que, conforme a 1 Corintios 15:45, el postrer Adán, que es Cristo, fue hecho Espíritu vivificante. Algunos distorsionan este versículo, diciendo que habla de “un Espíritu vivificante”, no de “el Espíritu vivificante”. Pero además del Espíritu Santo que da vida, ¿hay algún otro Espíritu que dé vida? Decir que hay dos Espíritus que dan vida es enseñar una gran herejía. Aunque se trate de un artículo definido o indefinido, el postrer Adán, que es Cristo mismo, fue hecho Espíritu vivificante. En este punto debemos referirnos a Juan 6:63, donde el Señor dijo: “El Espíritu es el que da vida”. En este capítulo el Señor Jesús dijo que Él era el pan de vida que da vida a la gente. Finalmente, indicó que a fin de ser vida como pan de vida, Él llegaría a ser el Espíritu, pues el Espíritu es el que da vida. Además, 2 Corintios 3:6 dice: “La letra mata, mas el Espíritu vivifica”. ¿No es el Espíritu mencionado en este versículo el Espíritu Santo? ¿Podemos decir que además de este Espíritu Santo que vivifica, hay otro Espíritu que vivifica? No, no podemos decir eso.

  Otra manera de distorsionar 1 Corintios 15:45 es decir que aquí el Espíritu vivificante no es el Espíritu Santo, sino el espíritu de Cristo como persona. Los que distorsionan el versículo de esta manera dicen que al igual que nosotros tenemos un espíritu, así también Cristo tiene un espíritu. Luego pasan a decir que aquí el Espíritu es el espíritu de Cristo, no el Espíritu Santo. Ciertamente, el Espíritu en este versículo es el Espíritu de Cristo. ¿Pero creen ustedes que además del Espíritu Santo hay otro Espíritu, el cual es el Espíritu de Cristo? Dicho de otra manera, ¿cree usted que, además del Espíritu de Cristo, hay otro Espíritu llamado el Espíritu Santo? No pienso que ninguna persona con un entendimiento que ha sido iluminado pueda creer esto.

  Los que distorsionan 1 Corintios 15:45 de esta manera es posible que no sepan que hoy el Espíritu Santo no solamente es el Espíritu de Dios, sino también el Espíritu de Cristo (Ro. 8:9) e incluso el Espíritu de Jesús (Hch. 16:7). Romanos 8:9 testifica que hoy el Espíritu de Dios es el Espíritu de Cristo, y Filipenses 1:19 testifica que el Espíritu de Cristo también es el Espíritu de Jesucristo. En su libro El Espíritu de Cristo, en un capítulo titulado: “El Espíritu del Jesús glorificado”, Andrew Murray dice que después de la ascensión de Cristo, el Espíritu Santo no vino de la misma manera que antes. En el Antiguo Testamento el Espíritu únicamente venía como el Espíritu de Dios, pero después de la resurrección y ascensión de Cristo, no sólo vino como el Espíritu de Dios, sino también como el Espíritu del hombre Cristo. Es más, Juan 7:39 dice que antes de la muerte y la resurrección de Cristo, “aún no había” este Espíritu. Sin embargo, el Espíritu de Dios ya estaba allí. Hoy el Espíritu Santo no sólo es el Espíritu de Dios, sino también el Espíritu de Cristo. Este Espíritu, quien es el Espíritu tanto de Dios como de Cristo, es el Espíritu vivificante. Después de Su resurrección, mediante Su resurrección y en Su resurrección, Cristo llegó a ser tal Espíritu vivificante. Sin lugar a dudas, éste es el Espíritu Santo vivificante.

  Pablo fue cauteloso al escribir 1 Corintios 15:45. Él no dijo: “Fue hecho [...] el postrer Adán, un espíritu”. Él agregó el adjetivo vivificante, diciendo: “Fue hecho [...] el postrer Adán, Espíritu vivificante”. Este modificador deja fuera cualquier argumento. ¿Quién es el Espíritu que da vida? ¿Creen ustedes que además del Espíritu Santo haya otro Espíritu divino que dé vida? La verdad es que hay únicamente un solo Espíritu divino, el Espíritu Santo, el Espíritu vivificante, el Espíritu de Cristo, que da vida. El Espíritu inmensurable en Juan 3 es el mismo Espíritu vivificante en 1 Corintios 15:45.

  La Biblia es profunda, pero lo que transmiten los credos antiguos está incompleto y es demasiado simple. Por ejemplo, los credos antiguos no hablan de los siete Espíritus, un asunto muy importante en el Nuevo Testamento. En el último libro de la Biblia, el libro de Apocalipsis, se habla de los siete Espíritus de manera enfática (1:4; 3:1; 4:5; 5:6). Sin embargo, en ninguno de los credos antiguos se hace mención de los siete Espíritus. Debido a que estos credos no son completos, algunos grupos cristianos declaran que el único credo al cual se apegan es la Biblia. Nosotros los seguimos al hacer la misma declaración. No tenemos otro credo más que la Biblia. Dado que ningún credo es completo, tomamos la Biblia entera como nuestro único credo.

El Cristo pneumático

  El Espíritu todo-inclusivo, el Espíritu inmensurable, es también el Cristo pneumático (2 Co. 3:6, 17-18; Ro. 8:9-11). Yo no inventé este término. Ha sido usado por otros, incluyendo a Kittel en su Theological Dictionary of the New Testament. Al describir al Cristo que vivió en la tierra, podemos hablar del Cristo en la carne. El término el Cristo pneumático se refiere a Cristo como el Espíritu. Debido a la enseñanza tradicional en cuanto a la Trinidad, algunos consideran al Espíritu como una persona separada de Cristo; entonces hablan de Cristo que está en el Espíritu. Aunque comúnmente se entiende que la frase el Cristo en la carne se refiere al propio Cristo cuando estaba en la tierra, no muchos entienden que la expresión Cristo en el Espíritu significa que Cristo es el Espíritu. Esto hizo necesario que algunos eruditos adoptaran el término el Cristo pneumático para referirse a Cristo, quien es el Espíritu. Debido a la influencia de la tradición, si hablamos acerca del Cristo en el Espíritu, otros podrían pensar que Cristo está separado del Espíritu. No se dan cuenta de que Cristo es el Espíritu.

  La palabra pneumático significa “espiritual”. No obstante, si usamos la frase el Cristo espiritual, y no el Cristo pneumático, se podría malentender.

  En ninguna parte del Nuevo Testamento se nos dice que Cristo, o el Hijo, está en el Espíritu. La Biblia ciertamente dice que el Padre está en el Hijo y que el Hijo está en el Padre (Jn. 17:21). Pero en el Nuevo Testamento no se halla la noción de que Cristo está en el Espíritu. En cambio, el Nuevo Testamento revela que el Cristo resucitado llegó a ser el Espíritu. En 2 Corintios 3:17 dice: “El Señor es el Espíritu”. Éste es el Cristo pneumático, Cristo mismo quien en resurrección llegó a ser el Espíritu vivificante.

  En años recientes he leído varios libros que indican que en nuestra experiencia como cristianos el Cristo resucitado es igual que el Espíritu. Esto no tiene que ver con la doctrina teológica; esto tiene que ver con nuestra experiencia espiritual.

  El Espíritu inmensurable es en realidad la aplicación del Cristo ilimitado. Cuando el Cristo ilimitado es aplicado a nosotros, y apreciado y disfrutado por nosotros, Él es el Espíritu inmensurable. Además, este Espíritu inmensurable es la vida eterna.

LA VIDA ETERNA

  En el capítulo 3 de Juan se menciona la vida eterna tres veces (vs. 15, 16, 36). La vida eterna es la vida divina, la vida del Dios eterno. Esta vida es eterna en cuanto a tiempo, espacio, esencia, función y poder.

  Esta vida eterna es la esencia misma del Dios Triuno, la cual llega a ser el elemento del aumento universal de Cristo, que es la expresión del Dios Triuno. Les aliento a que consideren este asunto. La vida eterna es la esencia del Dios Triuno que llega a ser el elemento de la iglesia, de la novia, y la novia es el aumento universal de Cristo, que será la expresión del Dios Triuno por la eternidad.

Biblia aplicación de android
Reproducir audio
Búsqueda del alfabeto
Rellena el formulario
Rápida transición
a los libros y capítulos de la Biblia
Haga clic en los enlaces o haga clic en ellos
Los enlaces se pueden ocultar en Configuración