Jesús sorprenderá a muchas naciones, y los reyes cerrarán la boca a causa de lo que Él es, pues ello es completamente diferente de lo que se imaginaron. La gente se sorprende al saber que una gran persona como Cristo en realidad fue un pequeño hombre que vivió en la menospreciada región de Galilea, en la menospreciada ciudad de Nazaret, en el hogar pobre de un carpintero, y de que Él fue rechazado, puesto en la cruz y crucificado (Is. 53:2-10a).
