En 17:16 la Babilonia religiosa es completamente quemada. Aquí, es totalmente quemada la Babilonia material. El cap. 17 narra la destrucción de la Babilonia religiosa; el cap. 18, la destrucción de la Babilonia material.

Según la ley levítica (Éx. 22:4, 7, 9), se requería una doble recompensa. Aquí la doble recompensa es duplicada.

O, crímenes, maldades.

Lit., juntado.

Puesto que Babilonia la Grande tiene dos aspectos, salir de ella significa salir tanto de la Babilonia religiosa como de la material. El pueblo de Dios debe salir de estos dos aspectos de Babilonia.

Roma, representada por Babilonia la Grande, tiene dos aspectos, el religioso y el material. Las naciones han bebido del vino…y los reyes de la tierra han fornicado … se refiere al aspecto religioso (Ap. 14:8; 17:2), mientras que los mercaderes de la tierra se han enriquecido … se refiere al aspecto material.

Algunos mss. dicen: han caído mediante.

O, prisión.

Ésta es la caída de la Babilonia material, la ciudad de Roma, al final de la gran tribulación (véase la nota Ap. 14:8^1b, la nota Ap. 16:19^2b y la nota Ap. 17:5^1b y la nota Ap. 17:18¹). La Biblia revela tres aspectos de Babilonia:
1) el aspecto literal, que se refiere a Babel o la Babilonia antigua (Gn. 11:9), que hoy es Irak;
2) el aspecto religioso, que se refiere a la Iglesia Católica Romana, de la cual se habla en el cap. 17
3) el aspecto material, que se refiere a la ciudad de Roma, mencionada en este capítulo.

Éste es el regreso de Cristo (la parusía) a la tierra al final de la gran tribulación para tomar posesión total de la tierra como Su reino. En aquel entonces la Babilonia material sufrirá el juicio y caerá.

Este Ángel que tiene gran autoridad es Cristo. Cuando desciende del cielo, la tierra es iluminada con Su gloria. En Ap. 10:1 Cristo todavía está vestido de una nube, y en Ap. 14:14 está sentado en la nube, mientras que aquí Su gloria ilumina la tierra, lo cual indica que Su regreso a la tierra está más próximo que cuando es mencionado en 10:1 y 14:14. Él saldrá del cielo, primero secretamente en la nube y después visiblemente sobre la nube para, finalmente, resplandecer sobre la tierra para destruir con Su gran autoridad a Babilonia la Grande, la ciudad de Roma.

Los cargamentos mencionados en los vs. 12-13 son varias cosas materiales, lo cual demuestra que Babilonia la Grande en este capítulo es la Babilonia material. Los cargamentos constan de siete categorías:
1) adornos, desde oro hasta perlas;
2) telas, desde lino fino hasta escarlata;
3) muebles y artículos decorativos, desde cedro hasta mármol;
4) especias, desde canela hasta olíbano;
5) alimentos, desde vino hasta ovejas;
6) medios de transporte, caballos y carros
7) mano de obra, esclavos y almas de hombres.

Un árbol conífero aromático.

Una especia.

Lit., cuerpos; se refiere a los cuerpos de los que están en esclavitud.

De la mercadería vendida por Babilonia, lo primero es el oro y lo último es las almas de hombres. Almas de hombres se refiere a los hombres que se venden a un empleo. Esto no sólo describe a la Babilonia venidera, sino también al mundo de hoy. Las personas venden su alma, su vida, es decir, se venden ellos mismos, a su ocupación, sin importarles ni Dios ni su propio destino eterno.

Lit., su alto precio.

El anticristo y sus ejércitos serán destruidos por Cristo en una hora (Ap. 17:12-14; 19:19-21), y la Babilonia material será también destruida por el Señor en una hora. Quizás ambas serán destruidas por el Señor en la misma hora de Su venida a la tierra en Su gloria iluminadora (Ap. 18:1; 2 Ts. 2:8).

Esto probablemente ocurrirá mediante el terremoto mencionado en Ap. 16:18-20.

O, encantos, su atracción venenosa.

Ésta es parte de la respuesta a la oración de los mártires en Ap. 6:9-10.