Según es tipificado por Eliaquim, el Cristo todo-inclusivo es también Aquel sobre cuyos hombros fue puesta (Ap. 3:7) la llave de (la casa del tesoro de, Is. 39:2 y la nota) la casa de Dios (tipificada por la casa de David con miras a la edificación del reino de Dios, 2 S. 7:16). La iglesia es tanto la casa de Dios (1 Ti. 3:15) como el reino de Dios (Mt. 16:18-19; Ro. 14:17). La llave puesta sobre el hombro de Cristo es la llave con la que se guardan todos los tesoros de la casa de Dios, que son todas las riquezas de Cristo para nuestro disfrute. Cristo es Aquel que puede abrir y cerrar la puerta que da acceso a la casa del tesoro que contiene las riquezas de Dios, las cuales están corporificadas en Cristo (Col. 2:9).
