Job es un libro en el que personas piadosas debaten sobre qué propósito tiene el sufrimiento de los santos, es decir, cuál es el propósito de Dios en el trato que aplica a Su pueblo. El libro está escrito en forma poética, con la excepción de los primeros dos capítulos y los once versículos finales del cap. 42. Job es el primero de los cinco libros de poesía en las Escrituras; los otros cuatro son Salmos, Proverbios, Eclesiastés y el Cantar de los Cantares.
El libro de Job, escrito bastante temprano en la progresión de la revelación divina (véase la nota Job 2:131, párr. 2), no contiene una clara revelación del propósito de Dios en el trato que aplica a Su pueblo. Esta revelación no le fue dada a Job, sino a Pablo. Según lo revelan las Epístolas de Pablo, el propósito de Dios al tratar con nosotros es despojarnos completamente de todas las cosas y consumirnos de tal modo que ganemos más y más de Dios (Fil. 3:8; 2 Co. 4:16). Cfr. la nota Gn. 42:21a y la nota Sal. 73:261b.