Véase la nota Hch. 7:21.
Véase la nota Hch. 7:21.
Pablo enfrentó a sus oponentes de una forma diferente a como lo hizo Cristo. Para efectuar la redención, Cristo fue como un cordero llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, no abrió Su boca cuando fue juzgado por los hombres (Is. 53:7; Mt. 26:62-63; 27:12, 14). Pablo, en cambio, como fiel y osado apóstol enviado por el Señor, tenía que hacer una defensa y proceder con sabiduría para salvar su vida de manos de sus perseguidores y así poder cumplir el curso de su ministerio. Aunque estaba dispuesto y listo para sacrificar su vida por el Señor (Hch. 20:24 la nota Hch. 21:121; Hch. 21:13), se esforzó por vivir más tiempo para llevar a cabo el ministerio del Señor hasta donde le fuese posible. Véase la nota Hch. 22:252 y la nota Hch. 23:31 y la nota Hch. 23:63.
Véase la nota Hch. 21:401.
Lit., varón judío.
Véase la nota Hch. 9:21c.
Se refiere al presbiterio, el cuerpo de ancianos (del sanedrín), por ende, el sanedrín. Véase la nota Mt. 5:226c.
Véase la nota Hch. 9:41a.
Véase la nota Hch. 9:51.
Es decir, comprendieron, como en Mr. 4:33; 1 Co. 14:2. Ellos oyeron la voz pero no la comprendieron, del mismo modo que contemplaron la luz, pero no vieron a nadie (Hch. 9:7).
Véase la nota Hch. 9:61.
Véase la nota Hch. 9:81.
Véase la nota Hch. 9:111.
Véase la nota Hch. 9:121c.
Véase la nota Hch. 8:361 y la nota Mr. 16:161a.
Véase la nota Hch. 2:211. Invocar el nombre del Señor aquí fue un medio para que Pablo se lavara de los pecados cometidos al arrestar a tantos creyentes que invocaban el nombre del Señor. Todos los creyentes sabían que Pablo consideraba invocar el nombre del Señor como una señal que distinguía a quienes él debía arrestar (Hch. 9:14, 21). Ahora él se había vuelto al Señor, para lavarse ante Dios y ante todos los creyentes de los pecados cometidos al perseguir y arrestar a los que invocaban al Señor, Ananías le mandó que invocara el nombre que antes había aborrecido. Él tuvo que hacer esto, un acto que iba en contra de su práctica anterior, mientras era bautizado, confesando públicamente al Señor a quien había perseguido.
Aquí Su reviste gran significado, dado que se refiere particularmente al nombre de Aquel a quien Pablo había odiado y perseguido (v. 8).
Véase la nota Hch. 10:103a.
Véase la nota Hch. 21:311b.
O, para ser azotado.
Al recurrir a su ciudadanía romana para salvarse de la persecución, Pablo demostró mucha sabiduría. Véase la nota Hch. 22:12b.
Véase la nota Hch. 22:51.