Sacará la piedra cimera equivale a completar la edificación. Los gritos de “¡Gracia, gracia a ella!”, indican que la piedra cimera es, ella misma, la gracia. La piedra cimera tipifica a Cristo, quien es la gracia de parte de Dios para nosotros a fin de ser la cubierta del edificio de Dios (véase la nota 1 Co. 15:101a). Cristo es la piedra del fundamento que sostiene el edificio de Dios (Is. 28:16; 1 Co. 3:11), la piedra del ángulo que une a los miembros judíos y gentiles de Su Cuerpo (Ef. 2:20; 1 P. 2:6) y la piedra cimera que da consumación al edificio de Dios.
