La bendición dada por Moisés en Dt. 33:12 afirma que Benjamín morará seguro al lado de Jehová y que Jehová mismo morará entre los hombros de Benjamín. Jerusalén y el templo de Dios, Su morada, estaban en el territorio de Benjamín (Jue. 1:21). Por tanto, la bendición dada a los doce hijos de Jacob concluye hablando de la morada de Dios, cuya máxima consumación será la Nueva Jerusalén, la morada mutua de Dios y Sus redimidos por la eternidad (Ap. 21—22). Ésta es la mayor bendición dada al pueblo de Dios.
Génesis 49:1-28 es un extracto de toda la Biblia y un resumen de la historia del pueblo de Dios, según puede ser vista en los doce hijos de Jacob, la nación de Israel y la iglesia. En este pasaje también se ve retratada la historia personal de todo creyente. Los primeros cuatro hijos de Jacob —Rubén, Simeón, Leví y Judá— eran pecadores, lo cual indica que la historia del pueblo de Dios comienza con pecadores. Sin embargo, dos de estos pecadores, Leví y Judá, fueron transformados hasta llegar a ser sacerdotes y reyes. Del reinado de Judá se produjo una salvación real, la cual fue predicada como evangelio en el mundo gentil por Zabulón y que, con Isacar, tuvo como fruto la vida de iglesia. Pero la apostasía fue introducida por Dan, seguida por el recobro con Gad, lo cual redundó —con Aser— en la suficiencia propia de las riquezas de Cristo y —con Neftalí— en la resurrección. Finalmente, la historia del pueblo de Dios concluye con José y Benjamín, quienes tipifican a Cristo como Aquel que es victorioso y perfecto en todo aspecto, sin defecto alguno. Según la profecía de Jacob y las palabras de Moisés, José trajo la bendición de Dios, que es universal y sin límites (vs. 22-26; Dt. 33:13-16), y Benjamín, la morada eterna de Dios (Dt. 33:12). Por tanto, la conclusión de Gn. 49 corresponde con la conclusión de la Biblia entera, a saber: la bendición universal en el cielo nuevo y la tierra nueva, donde está la morada eterna de Dios, la Nueva Jerusalén, como fruto y meta final de la bendición universal de Dios (cfr. Ef. 1:3; 2:22).