Lo dicho en los vs. 9-10 indica que no había manera de que el pueblo de Israel fuese sanado y recobrado. Con excepción de lo dicho sobre la simiente santa en el v. 13, la advertencia profética de los vs. 9-13, dada aproximadamente el año 758 a. C., se ha cumplido. Esto comenzó a cumplirse aproximadamente el año 606 a. C. por obra de la invasión babilónica y el consiguiente cautiverio (2 R. 24; 2 R. 25). Esta advertencia fue citada por el Señor Jesús en Mt. 13:14-15 y nuevamente por el apóstol Pablo en Hch. 28:25-27 bajo sus respectivos ministerios a manera de recordatorio para los judíos rebeldes y obstinados. Lo que les fue recordado tanto por el Señor como por el apóstol se cumplió en el año 70 d. C. por obra del ejército romano bajo el mando de Tito (Mt. 23:37-38; 24:2). Además, después del año 70 d. C., esta advertencia se ha cumplido a lo largo de los siglos.
