Véase la nota Lc. 10:303.
Véase la nota Lc. 10:303.
Véase la nota Mt. 5:462.
Cierta higuera. Sus hojas son semejantes a las de la morera común, y su fruto es semejante al de la higuera.
Una vez que un pecador recibe al Salvador, el resultado de la salvación dinámica es que él resuelve el asunto de las posesiones materiales y de su antigua vida de pecado.
La misma palabra griega de Lc. 3:14 un eufemismo de “extorsionado”. Los recaudadores de impuestos solían poner un valor más alto a la propiedad o a los ingresos, o aumentaban los impuestos a los que no podían pagar, y además cobraban usura.
Esto indica que el Salvador no fue a Jericó por casualidad, sino con el propósito de buscar en particular a este pecador perdido, así como buscó a la mujer pecaminosa en Samaria (Jn. 4:4).
Desde el punto de vista espiritual, esta parábola adicional es una continuación del caso anterior de salvación. Describe cómo los salvos deben servir al Señor para heredar el reino venidero.
O, sería traído a la luz, se manifestaría.
Representa al Salvador, quien tiene la más elevada condición: Dios-hombre, honorable en Su deidad y noble en Su humanidad.
Indica el regreso del Salvador cuando venga con el reino (Dn. 7:13-14; Ap. 11:15; 2 Ti. 4:1).
En la parábola de Mt. 25:14-30 a los esclavos se les da un número variable de talentos según su habilidad individual; aquí la parábola recalca la porción común dada a cada esclavo por igual, con base en la salvación común a ellos. Sin embargo, el fin de ambas parábolas es el mismo: la fidelidad de los esclavos determinará su porción en el reino venidero como su recompensa.
Una mina equivale a cien dracmas, o el salario de cien días.
Lit., mientras vengo.
Se refiere a los judíos incrédulos.
Esto se cumplió en Hch. cap. 2—9.
Indica que la recompensa de los santos vencedores, reinar en el reino venidero, diferirá en extensión.
Con respecto a los vs. 20-26, véanse las notas de Mt. 25:24-29.
Indica que los creyentes infieles guardan su salvación de una forma ociosa, en vez de usarla productivamente. Guardar de este modo la salvación del Señor es no hacer uso de ella. Tal ociosidad ante el Señor hará que los creyentes infieles sean juzgados y sufran pérdida.
Uno que exige estrictamente, esta expresión no es tan fuerte como hombre duro en Mt. 25:24 (véase la nota 3).
O, condenaré.
Lit., sobre la mesa (de los cambistas).
Indica que todos los judíos incrédulos que rechacen al Salvador perecerán.
En el versículo anterior el Salvador concluyó Su ministerio. Ahora ha llegado el momento en que Él debe subir a Jerusalén para presentarse a la muerte que Dios ordenó para la realización de la redención eterna (véase la nota Mr. 10:11 y la nota Mr. 10:331). Aunque sabía que los líderes judíos buscaban la oportunidad de matarlo, siguió adelante con valor.
Con respecto a los vs. 29-38, véanse las notas de Mt. 21:1-9.
Lit., extendían por debajo.
Esto ocurrirá en la restauración de Israel (Hch. 1:6) después del regreso del Salvador.
Esto se cumplió en el año 70 d. C. por medio de Tito y el ejército romano.
La primera venida del Salvador, cuando los visitó en gracia, en el año aceptable del Señor (Lc. 2:10-14; 4:18-22). Perder la visitación de gracia del Señor y, por ende, perder la oportunidad de arrepentirse y ser salvo, hará que la persona sea juzgada y se lamente para siempre.